¡Vivas, con trabajo y con derechos nos queremos!
Las mujeres trabajadoras de la Mesa de Unidad Sindical de Chivilcoy, repudiamos el feroz ajuste del gobierno sobre el pueblo trabajador, que tiene como resultado la pérdida de miles de puestos de trabajo, la flexibilización, precarización, endeudamiento, techo salarial paritario, reforma jubilatoria y represión de las protestas. En general somos nosotras las que nos insertamos en trabajos más precarizados o ni siquiera reconocidos como tal, y estamos en situaciones de mayor vulnerabilidad. Entendemos que sin trabajo no hay justicia social y que cuando existe un plan de exterminio del trabajo, somos nosotras las primeras en caer.
Nos manifestamos en contra de la Reforma laboral que pretende imponer el gobierno y señalamos que el Proyecto de Ley sobre equidad de género, ingresado por Cambiemos en la Cámara de Diputados y Diputadas de la Nación, el 12 de marzo de este año, es una acción oportunista que lejos de avanzar y garantizar la igualdad, esconde una mayor flexibilización laboral. Otorga facultades intervencionistas al Ministerio de Trabajo, dando vía libre para intervenir sindicatos por el cumplimiento del cupo femenino, pero no exige a la patronal la incorporación de mujeres y el colectivo LGTBIQ en los puestos de trabajo, esto favorece a los empresarios y demoniza el activismo sindical y político. El tema de la igualdad de géneros en los trabajos es un reclamo histórico, sin embargo, queremos discutir un Proyecto de Ley de Equidad de Géneros que nos incluya y que garantice, por ejemplo, licencias especiales para los casos de violencia de Género con atención y asistencia a las víctimas.
Por otro lado, los recortes presupuestarios en salud y educación afectan directamente nuestros derechos, por eso repudiamos el incumplimiento de la Ley Nacional de ESI 26.150 (Educación Sexual Integral) porque el Estado no provee de materiales a las Escuelas, desvaloriza las acciones de capacitación, terceriza la formación en ONGs, Fundaciones y Asociaciones religiosas que sesgan el debate. Como también, el recorte de los programas REMEDIAR, Programa Nacional de Salud Sexual y Procreación Responsable y Programa de VIH.
Por eso exigimos: Educación Sexual Integral con perspectiva de género y diversidad en todas las escuelas. Capacitación permanente, en servicio y gratuita para docentes de todo el país. Interrupción voluntaria del embarazo y legalización del aborto para no morir.
Lo que está en discusión es cómo se construye la autonomía económica y los derechos que permitan combatir la violencia de género en todas sus formas y ámbitos. Entonces decimos:
Sin políticas públicas de fondo que realmente contribuyan a la equidad de géneros, No hay “Ni un menos”.
Con recortes presupuestarios en Salud y Educación, No hay “Ni una menos”.
Con tarifazos en los hogares de cada compañera, No hay “Ni una menos”.
Con ajustes, precarización laboral y desempleo, No hay “Ni una menos”.
¡Vivas, Libres y desendeudadas nos queremos!
Mesa de Unidad Sindical CGT – CTA